Hay varios métodos con los que podemos evitar o resistir la aversión a las personas transgénero. Uno es mediante el activismo, como podría se el participar en manifestaciones públicas, en el debate social, etc. Otro es usando el poder blando, por ejemplo el de la educar a alguien que no sepa o sea ajeno al tema.
Una amiga hizo un comentario muy acertado. Ella dijo: “sueño con el día en el que ser trans sea tan sobresaliente como usar lentes.” En lo personal pienso que una de las maneras más eficaces de instruir al público en general es mediante la normalización de nuestras experiencias como personas transgénero.
Sinónimos de normal
- habitual, ordinario, corriente, común, usual, frecuente, acostumbrado.
- lógico, natural, razonable.
Cuando daba clases a anglohablantes siempre empezaba la primera clase bromeando de mi inglés y de mi acento. Al ponerme en esa posición vulnerable me permitía luego despreocuparme de cometer algún error gramatical o de pronunciación. Varias veces he utilizado un método similar para compartir y a su vez normalizar algunas de mis experiencias trans.
Ejemplos prácticos de poder blando
En ocasiones me he sincerado con algunas personas cisgénero con el mero afán de que se enteren de que soy trans o de que sepan sobre algo que solo se vive como persona transgénero. Me gusta controlar la narrativa pero de manera suave. Es como tomar al toro por los cuernos pero sin que se dé cuenta. Generalmente lo hago de manera calculada.
Anular la opción de la negativa
Hace unos años visitaba una ciudad con una sociedad algo tradicionalista y conservadora y tenía una cita con una dermatóloga para un tratamiento de Botox. Era la primera vez que yo veía a dicha doctora pero yo quería que supiera que estaba tratando a una persona trans. Al principio de la consulta ella quería saber cuales eran mis objetivos y que experiencia tenía yo con el Botox. Le expliqué y la discusión fue muy cordial aunque no hice mención de mis antecedentes con mi transición.
Pensé que cuando me estaría preparando para las inyecciones sería buena oportunidad mencionar algo sobre mi historia trans. Como ya habíamos entablado una buena relación profesional previa a ese instante ya no tendría oportunidad de rechazarme. Si lo hubiera hecho al momento del tratamiento ella hubiera quedado como una persona intolerante. Aunque nunca sentí que la doctora fuera a ser intransigente yo quise hacer patente mi orgullo como persona trans. Al final sentí que se había incomodado un poco pero no lo puedo aseverar ya que no dijo nada al respecto.
Diplomacia en silencio
No escondo el hecho de que soy tans pero al mismo tiempo no lo divulgo con alarde. Un ejemplo de como hago diplomacia en silencio es con una estampa de la bandera del orgullo trans que tengo en mi ordenador portátil.
Cuando anexé la imagen de los colores del orgullo trans a mi laptop me entró la reserva de que estaría anunciando mi identidad como persona trans en cualquier lugar a donde me presentara con mi MacBook. Pero también me forcé a salirme de mi zona de confort con el mismo objetivo de hacer presente mi filiación con la comunidad trans. Esto tal vez sea parte del proselitismo más escandaloso que hago.
Algunas personas han hecho algún comentario de apoyo después de ver o apuntar a la estampa. Supongo que algunas otras también la noten aunque no me digan nada, y muy probablemente habrá gente que ni conoce el significado de la bandera. 🏳️⚧️
En la conversa ordinaria
Este ejemplo de poder suave me agrada bastante porque da pie a ahondar en temas que no son comunes en el diálogo cisgénero.
En alguna ocasión estaba yo con mi manicura y ese mismo día era la cirugía de feminización de voz de una muy amiga mía. De manera casual le compartí a la manicura que estaba yo esperando noticias de mi amiga y como es de suponerse no sabía que existía dicho procedimiento. Fue una excelente oportunidad de compartirle lo básico de la cirugía y las razones tan importantes por las que algunas personas la consideran y se someten.
En conclusión
El poder blando de educar e informar al compartir nuestras experiencias no es la única táctica para reducir y eliminar la repulsión pero es uno con los que más me alineo. También hay modos de coerción que sean más afines para otros pero a mi no me va el enfrentamiento sobretodo si lo puedo evitar.
Activista para uno: prefiero hablar con alguien de manera íntima a tratar de convencer a un grupo de personas que no conozco.